Las claves para una correcta y cómoda vuelta a la oficina

Tras un auge sin precedentes en la práctica del teletrabajo, a raíz de la pandemia, la tendencia está comenzando a acercarse a los niveles previos al Covid. 3 de cada 4 habitantes en España tienen su pauta de vacunación completa; además, paulatinamente, se van recuperando las costumbres y el estilo de vida con el que contábamos hasta 2019.

Todo ello suma para que los últimos datos indicasen que un 7,89% de los empleados trabajan más de la mitad de sus horas en remoto. Lo cual supone aún el triple que las cifras de 2019 -solo un 2,48% trabajaba fuera de la oficina- pero también la mitad del porcentaje alcanzado en el año 2020, cuando se llegó a un 15,28% de ‘teletrabajadores’.

El trabajo presencial permite una mayor cohesión de equipos

Las comodidades que supone el poder trabajar desde casa son innegables. No obstante, acudir a los puestos de trabajo también ofrece ventajas tanto a empleadores como a empleados. Entre otras, el trabajo en equipo se hace más sencillo y efectivo; la creatividad y las interacciones sociales se ven favorecidas; y la sensación de aislamiento que han sufrido muchos trabajadores queda reducida o eliminada.

Además, la posibilidad de conciliar vida familiar y laboral, a priori una realidad positiva, ha mostrado la otra cara de la moneda durante este tiempo. La imposibilidad para algunas personas de diferenciar ambas esferas o de desconectar son inconvenientes derivados del teletrabajo.

Cómo preparar una vuelta a la oficina sencilla y segura para tus empleados

Los empleadores que estén preparando una vuelta -ya sea paulatina o directa, ya sea mediante un modelo híbrido o completamente presencial- de sus empleados a la oficina, deben tener en cuenta una serie de factores clave para facilitar el proceso.

Lo primero es garantizar unas precauciones y protocolos que preserven la salud de todas las personas. La pandemia aún no ha terminado y, cuando lo haga, sería conveniente mantener algunas de las normas de higiene que nos hemos visto ‘forzados’ a cumplir.

También es aconsejable que sean consecuentes con las necesidades personales de cada trabajador. El tiempo de adaptación a un entorno que, sobre todo para quienes desempeñasen su labor completamente en remoto, no es el habitual, puede variar para cada persona. Tenerlo en cuenta será beneficioso para todas las partes.

Seguir ofreciendo una cierta flexibilidad es también una ayuda para que los empleados se sientan con confianza. Quizá manteniendo un modelo híbrido, el preferido por la mayoría.

Si eres empleado, tómate tu tiempo

La vuelta a la oficina es una oportunidad para reencontrarse con los compañeros y sentirse parte del equipo con mayor facilidad. Sin embargo, es normal que al principio cueste. Por tanto, prácticas como la meditación pueden ayudarnos a sobrellevar angustias, miedos o incertidumbres acerca del regreso a nuestros puestos de trabajo.

Recordar que podemos exigir que se cumplan unas medidas que garanticen nuestra salud y seguridad en el caso de que no sea así también nos puede proporcionar cierta calma, sobre todo si nos asusta la pandemia.

Seguir estos consejos por parte de cada individuo en la empresa es el camino hacia una reincorporación positiva y reconfortante para todos.